"Las reservas internacionales del Banco Central registraron una caída de US$ de 13.799 millones durante el mes", señaló el organismo en su Informe de la Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario.
"Esta caída se dio tanto por transferencias al exterior ("operaciones de canje", que totalizaron US$ 3.400 millones en el mes), como por extracciones de efectivo", sostuvo el informe.
El Tesoro destinó 5.374 millones de dólares en el pago de la deuda, a lo que se suman 4.800 millones de dólares que se retiraron de los depósitos en moneda extranjera y las ventas que realizó el Banco Central y el Tesoro en el mercado de cambios para contener la depreciación del peso argentino.
La demanda neta de dólares por parte de personas físicas llegó en agosto a 1.873 millones de dólares, 9% menos que en el mismo mes de 2018.
De este modo, las reservas internacionales brutas finalizaron agosto en 54.100 millones de dólares.
Durante septiembre el stock del BCRA también se redujo, pues hasta el pasado 18 de este mes las reservas se situaban en 49.818 millones de dólares.
Desde el 1 de septiembre rige un control de cambios que impide a los ahorristas individuales comprar más de 10.000 dólares mensuales.
Las empresas no pueden atesorar dólares, según las disposiciones que estableció el Gobierno para restringir la salida de capitales.
El Banco Central también ordenó pesificar los ingresos en dólares de los exportadores de servicios, sean personas o empresas.
El Gobierno de Mauricio Macri atraviesa una de las coyunturas económicas más difíciles desde 2015, con una inestabilidad que pone en duda la solvencia financiera de Argentina.
El único acreedor externo que tiene Argentina es el Fondo Monetario Internacional, que acordó con el Ejecutivo en 2018 un crédito por 56.300 millones de dólares.