"Esta temporada se han registrado muy pocas ballenas jorobadas en el estrecho, la causa de la desaparición de los cetáceos sigue siendo un misterio", indica el comunicado.
Los expertos de la facultad de Biología de la Universidad Estatal de Moscú y de la filial de Kamchatka del Instituto de Geografía del Pacífico de la Academia de Ciencias rusa llevan tres años realizando una investigación conjunta de esos mamíferos marinos de Chukotka con el Parque Beringia.
"Durante toda la temporada de 2019 los científicos lograron fotografiar en el estrecho Seniavin a 16 ballenas, mientras en los años pasados se registraban unas 100", destaca el documento.
Por su parte la bióloga Olga Filátova advirtió que la cifra de cetáceos de ese tipo disminuyó en otros territorios también, y una de las causas de su desaparición puede radicar en el cambio climático.
Los científicos advirtieron que, de desaparecer del todo los cetáceos jorobados del estrecho, se pondrá en tela de juicio la investigación que están realizando.
Antes de la moratoria implementada en 1966 el número de yubartas se había reducido considerablemente, hasta unos 20.000 ejemplares, a causa de la caza.
El hecho de que los dibujos de la aleta caudal puedan utilizarse para identificar a cada animal convirtió a la yubarta en el mamífero marino más estudiado.