"La detención no se puede compensar solo con la liberación del barco, se necesita un juicio y una compensación para dar ejemplo a cada uno que viole el derecho internacional", dijo Raisi, citando por la agencia iraní Mehr.
El petrolero Grace 1, reabanderado como buque iraní bajo el nombre Adrian Dary, zarpó este 18 de agosto de Gibraltar tras haber permanecido más de un mes bajo arresto ante la sospecha de que transportaba el crudo para una refinería de Siria sujeta a las sanciones de la Unión Europea.
Una corte del distrito de Columbia, en EEUU, emitió el 16 de agosto una orden de confiscación en relación con el Grace 1, alegando supuestas violaciones de la ley de facultades económicas en casos de emergencia internacional (IEEPA, en inglés), así como de los estatutos de fraude bancario, lavado de dinero y decomiso por terrorismo.
No obstante, el Gobierno de Gibraltar aclaró este 18 de agosto que las leyes en vigor no le permiten retener el Grace 1 con un cargamento de crudo iraní, pese a la solicitud por parte de EEUU.
Sobre el petrolero de bandera británica Stena Impero, detenido en el estrecho de Ormuz dos semanas después de la incautación del Grace 1 en Gibraltar, el diplomático iraní afirmó que es un caso aparte.
"Habrá que esperar una resolución judicial para liberarlo", agregó.
De acuerdo con la versión oficial que Irán presentó a la Organización Marítima Internacional, el Stena Impero colisionó con un pesquero iraní, además de que entró en el estrecho de Ormuz por la vía equivocada, la de salida, y navegó con el sistema de comunicación apagado poniendo en peligro la seguridad del tráfico marítimo.