"Disculpen el retraso en nuestras comunicaciones, estamos desbordados atendiendo a las 107 personas que aún llevamos a bordo. Tras 18 días de haber sido rescatadas, aun tenemos casos médicos en la cubierta. Espero comprendan la dificultad de gestionar esta crítica situación", publicó Camps en su cuenta de Twitter.
Disculpen el retraso en nuestras comunicaciones, estamos desbordados atendiendo a las 107 personas que aún llevamos a bordo. Tras 18 días de haber sido rescatadas, aun tenemos casos médicos en la cubierta. Espero comprendan la dificultad de gestionar esta crítica situación. pic.twitter.com/BlpoCqIISf
— Oscar Camps (@campsoscar) August 19, 2019
Después de varias evacuaciones urgentes, la cifra de migrantes a bordo del Open Arms que esperan el permiso para desembarcar en un puerto seguro se redujo de 160 a 107.
Los responsables del Open Arms y otras organizaciones como la ONG italiana Emergency emitieron informes alertando de que la situación a bordo resultaba "insostenible" ya que, ante la situación de incertidumbre, varios de los migrantes intentaron autolesionarse y otros incluso amenazaron con suicidarse.
El 18 de agosto, un grupo de al menos cuatro migrantes se lanzó al agua para intentar llegar a Lampedusa a nado, aunque finalmente fueron interceptados por los socorristas del Open Arms.
Ante esa situación, España ofreció al barco la posibilidad de desembarcar en Algeciras en un principio, y luego en Palma y Mahón que quedan más cerca, pero Open Arms insiste en realizar el desembarco en la isla italiana de Lampedusa.