Los recientes ataques, algunos de ellos atribuidos a Israel, son lanzados para evitar que Irán se atrinchere en Siria y transfiera equipos al Líbano, según los israelíes, y han llevado a los iraníes a preferir el envío de una parte del armamento por mar.
Irán preferiría evitar una confrontación directa con Israel en el mar debido al interés de Teherán en regresar a la mesa de negociaciones para poner fin a las sanciones que ahogan su economía, afirman los funcionarios.
En mayo de 2018 EEUU abandonó el llamado Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) firmado por y seis mediadores internacionales —Rusia, EEUU, Reino Unido, China, Francia y Alemania— acusando a Irán de seguir desarrollando armas nucleares, y restableció desde entonces varias baterías de sanciones contra la república islámica.