"Para Bolivia es la puerta para entrar a otro nivel de capacidad científica y la posibilidad de realizar eventos científicos a nivel regional", dijo a Sputnik el alto ejecutivo de Rusatom Overseas, la división de la corporación Rosatom para los proyectos en el extranjero.
En septiembre de 2017, la Agencia Boliviana de Energía Nuclear firmó un contrato con la compañía rusa para la construcción de un centro de investigaciones nucleares en El Alto.
"El centro tendrá varias áreas de actividad y en primer lugar, el reactor experimental y la gran cantidad de laboratorios posibilitarán que se realicen distintas investigaciones con alcance regional", explicó Pakermánov.
Por otro lado, puntualizó, se trata de una instalación industrial para producir radioisótopos con una planta de irradiación para el tratamiento de productos agroindustriales.
Pakermánov no descartó que en el futuro se construyan más centros de irradiación.
"Esto posibilitará el desarrollo de la exportación y mejorará el rendimiento de la agricultura", señaló.
El alto ejecutivo sostuvo que no es necesario que esos centros se ubiquen cerca del reactor experimental y podrían ser construidos en lugares accesibles para los usuarios finales.
"Hemos sostenido consultas con varios países", dijo, pero se abstuvo de mencionarlos.
Rosatom construyó más de 120 centros, de ellos una veintena en el extranjero. Zambia suscribió recientemente un contrato y actualmente se llevan a cabo conversaciones con Serbia, Ruanda, Vietnam y otros países.
Pakermánov resaltó que la planta de Bolivia es de suma importancia para Rosatom.
"De hecho, es nuestro primer gran proyecto en América Latina", apostilló.