"En cuanto al regreso de Rusia, hemos hecho varios intentos, todavía no hemos completado ese proceso", dijo Merkel, agregando que "se están haciendo esfuerzos, (...) pero eso no se puede realizar a cualquier costo".
Poco antes el Gobierno ucraniano avisó que revisaría sus relaciones con la PACE si Rusia resultaba invitada a la sesión que celebrará el organismo del 24 al 28 de junio.
La PACE privó en abril de 2014 a la delegación rusa del derecho al voto, violando sus propios estatutos, después de que Crimea se escindiera de Ucrania y se reincorporara a Rusia.
En respuesta a la decisión del organismo parlamentario, Moscú dejó de enviar a su delegación en 2016, y un año después suspendió el pago de cuotas hasta que no le sean restituidos completamente sus derechos.
Más aquí: La participación de Rusia en el Consejo de Europa, un problema pendiente y urgente
El Consejo de Europa advirtió en respuesta que si un Estado no desembolsa sus contribuciones durante dos años consecutivos, podría ser excluido de la organización, plazo que para Rusia vence precisamente este mes.
El tránsito de gas por Ucrania
A su vez, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, considera que es necesario conservar el tránsito del gas ruso a través del territorio ucraniano como una garantía de la seguridad energética de Europa.
"Conservar el tránsito del gas ruso a través de Ucrania y acumularlo en las instalaciones de almacenamiento de Ucrania representa una garantía de la seguridad energética de Ucrania y Europa", dijo el mandatario ucraniano al resumir el resultado de su encuentro con la canciller alemana, Angela Merkel.
Para Zelenski, se trata de "un método civilizado de garantizar un mercado de gas justo y seguro".
El proyecto Nord Stream 2 prevé el tendido de dos tuberías de gas con capacidad total de 55.000 millones de metros cúbicos anuales desde la costa rusa hasta Alemania por el fondo del mar Báltico.
El gasoducto pasará por las aguas territoriales y/o las zonas económicas exclusivas de Alemania, Finlandia, Rusia, Suecia y Dinamarca.
Además: Wintershall: la presión sobre Nord Stream 2 no debe ser instrumento de competencia