En un capítulo más de sus medidas para proteger la industria nacional, Trump volvió a arremeter contra su vecino. Está vez fue a través de lo que la prensa ha bautizado como 'la guerra de los tomates', que implicó el restablecimiento de un arancel de 17,5% del que la industria tomatera mexicana estaba exenta.
"Es una muy mala noticia", dijo en diálogo con Sputnik el doctor en Negocios Internacionales Ignacio Bartesaghi. "Lo que hay en juego son exportaciones por 2.000 millones de dólares". Para el también Decano de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Católica de Uruguay, aunque se espera que al menos en parte esas exportaciones sean sustituidas por producción nacional, los efectos negativos no serán menores.
"Se va a sentir en el (aumento de) precio y ya se está sintiendo en los productos intermedios. Es evidente que en una lógica de cadenas globales de valor, esta es una medida que en el mediano y largo plazo es contraproducente(…). En el corto plazo puede tener resultados en la industria nacional, pero en el largo plazo es bastante difícil porque la economía está demasiado integrada", apuntó el experto.
Es que tanto China como México son productores de cientos de insumos utilizados por Estados Unidos. Así, 'al final del día', ambos países son proveedores de la industria a la que se les culpa de destruir.
Para Bartesaghi el movimiento de Trump podría estar vinculado con la aprobación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (TMEC). Este acuerdo multilateral que comparte con las mencionadas naciones sustituye al viejo Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que aún carece de ratificación.
"En el caso de México parece ser una señal que le da Estados Unidos para que se dé una rápida incorporación al TMEC. Recordemos que este país obtuvo concesiones interesantes de México en lo que tiene que ver con el comercio regional", apuntó.
Sus palabras tuvieron lugar en una rueda de prensa en Toronto, Canadá, en la que asistió acompañada por la ministra de Asuntos Exteriores de ese país, Chrystia Freeland. La canciller también se refirió a las trabas comerciales con Estados Unidos y apuntó que es relevante restablecer el libre comercio en la región de América del Norte. En este sentido consideró de vital importancia la eliminación de aranceles antes de que se ratifique el TMEC.