El presidente del Congreso Judío Europeo, Viacheslav Moshe Kantor, indicó que el antisemitismo está cobrando impulso en EEUU y que se está convirtiendo gradualmente en la norma, al igual que en la década de 1930.
En EEUU, la cantidad de agresiones contra judíos también alcanzó su punto máximo: 101 casos de violencia física por año. Esto es más que en todos los países de Europa continental juntos. En segundo lugar está el Reino Unido con 66 casos. En Rusia solo se registraron cuatro casos en 2018. De estos, dos estuvieron asociados con incidentes en el Mundial de Fútbol cuando los hinchas de las selecciones nacionales de Marruecos y Túnez atacaron a unas personas por exhibir la bandera de Israel.
Es más, a diferencia de EEUU o Europa Occidental, no se han registrado ataques graves contra judíos ni asesinatos en el país euroasiático. En Rusia, los judíos están más seguros, subrayó el profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén, Samuel Barnai, en su entrevista con el periódico ruso Izvestia.
Según Dina Porat del Centro Cantor para Contrarrestar el Antisemitismo, los judíos estadounidenses y europeos en aras de la seguridad personal están dejando de usar la kipá y la estrella de David.
"Los judíos admiten cada vez más que ya no se sienten a salvo en sus países. Pierden su sentido de patria y están pensando cada vez más en emigrar a Israel", cuenta Porat.
Hablando sobre por qué está renaciendo el antisemitismo en los países europeos, la profesora de la Universidad de Tel Aviv, Esther Webman, menciona a los migrantes. En su opinión, existe una cierta correlación entre la afluencia de refugiados de los países musulmanes y el crecimiento del antisemitismo en la UE. Sin embargo, no se puede decir que el problema se deba únicamente a la crisis migratoria, subraya Webman.