"La presencia de ciudadanos extranjeros venezolanos está ejerciendo presión (…) en lo que atañe al empleo; hay una legítima preocupación de nuestros trabajadores por si están siendo desplazados o no en los puestos de trabajo que actualmente ocupan", dijo Cáceres en declaraciones al Canal N.
La ministra estimó que unas 800.000 personas de Venezuela, entre adultas y menores de edad, residen actualmente en Perú.
El Gobierno no permanece "indiferente" a la situación y el Ministerio de Trabajo realiza inspecciones a centros de labores en busca de venezolanos empleados irregularmente, según Cáceres.
"(En estos días) se han practicado 2.000 acciones de inspección de las cuales 600 han dado lugar a sanciones efectivas y 1.400 son de orientación porque el marco legal de contrataciones de extranjeros no es conocido por todos los empleadores", dijo.
Cáceres reiteró que emplear a un venezolano en lugar de un peruano porque cobra menos por el mismo trabajo constituye un acto de "discriminación" que merece ser castigado.
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Por otro lado, la ministra de Trabajo hizo mención a la labor del Ministerio del Interior en detectar a quienes hayan ingresado irregularmente al país para proceder a su expulsión.
"Desde un punto de vista migratorio, se han tomado acciones que han llevado a expulsar a ciudadanos venezolanos a su tierra de origen porque se ha incumplido normas migratorias", dijo.
"Por estrategia no diré el número, pero son muchos más los venezolanos con antecedentes (policiales) que hemos identificado, y las expulsiones continuarán hasta que hayamos sacado hasta al último venezolano con antecedentes", dijo Morán al diario Perú 21.
El Ministerio del Interior en coordinación con la cancillería expulsó el 29 de abril a medio centenar de inmigrantes venezolanos con antecedentes penales en su país de origen, tras comprobar que habían omitido esa información en su ficha migratoria.