"Creo que no tenemos interés en las sanciones", dijo Altmaier.
"La UE estaba unida, pero debemos trabajar para cambiar las relaciones políticas de manera que algún día tomemos otras decisiones", subrayó el ministro.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la situación en Ucrania y la reunificación de Crimea con Rusia tras el referéndum celebrado en marzo de 2014, en el que más del 96% de los votantes avaló esta opción.
Desde entonces, Estados Unidos, la UE y otros países, aprobaron varios paquetes de sanciones contra Rusia.
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Moscú, que respondió a las sanciones con un embargo agroalimentario, ha subrayado en reiteradas ocasiones que no es parte del conflicto en Ucrania, y reafirmó que la adhesión de Crimea se llevó a cabo respetando la legislación internacional y la Carta de la ONU.
Nord Stream 2
Además, Peter Altmaier declaró que el proyecto de gasoducto Nord Stream 2 garantizará los suministros de gas a Europa.
"Contribuirá a garantizar los suministros de gas a Europa en unos tiempos cuando se reducen las importaciones de gas de Noruega y el Reino Unido mientras crecen las necesidades en Alemania y en Europa Occidental por la reforma energética y la renuncia al carbón y la energía nuclear", dijo el ministro.
Altmaier recordó que el proyecto cuenta con autorizaciones de cuatro de los cinco países por los que pasará y está terminado en gran medida.
El gasoducto pasará por las aguas territoriales y/o las zonas económicas exclusivas de Alemania, Finlandia, Rusia, Suecia y Dinamarca.
Para la construcción del gasoducto es necesaria la autorización de todos los cinco países, actualmente queda pendiente solo la de Dinamarca.
La infraestructura fue concebida para diversificar las rutas del suministro del combustible a Europa y elevar la seguridad energética.
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Se oponen al proyecto Ucrania, que teme perder sus ingresos por el tránsito del gas ruso y otros países europeos como Polonia, Letonia y Lituania.
También expresó su recelo Estados Unidos, que busca vender a Europa su gas natural licuado.