GSMA, el grupo industrial con sede en Londres, urgió a los legisladores europeos a no vetar a Huawei como proveedor de redes inalámbricas.
El grupo CTIA, con sede en Washington, respondió el 19 de febrero que GSMA "no representa los puntos de vista de todos los operadores inalámbricos o todas las regiones".
"Estos comunicados divergentes subrayan la apertura de una brecha entre Washington, los operadores y los reguladores en todo el mundo que están reevaluando las advertencias de EEUU acerca de que la corporación más grande de China ayuda a Pekín a espiar", escribe el periodista Todd Shields en su artículo para Bloomberg.
También: China tiene otro as bajo la manga en el 'juego' de Occidente contra Huawei
Esta semana la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, dejó la puerta abierta para que Huawei desempeñe un papel en el futuro despliegue de las redes de quinta generación de ese país. Los operadores europeos se ofrecieron a cooperar con sus gobiernos para tomar todas las precauciones y evitar las vulnerabilidades.
CTIA, que incluye a líderes del mercado estadounidense como AT&T y Verizon Communications, urgió a los reguladores estadounidenses a ir despacio en la creación de reglas relacionadas con la seguridad de los equipos.
"Parece que temen el impacto de la política europea sobre el despliegue de sus redes 5G", declaró Gigi Sohn del Centro de Derecho de la Universidad de Georgetown.
EEUU y China colisionaron el 16 de febrero en la Conferencia de Seguridad de Múnich acerca de la cuestión de si deben o no ser vetados los equipos de Huawei para las redes 5G.
El vicepresidente Mike Pence declaró que la empresa es obligada a pasar datos a los oficiales de seguridad de Pekín.
Sin embargo, Yang Jiechi, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China, subrayó que "las leyes de China no obligan a las empresas a instalar ‘puertas traseras' o recolectar datos de inteligencia".
El funcionario además exhortó a los europeos a considerar si EEUU de verdad se preocupa por los intereses de Europa o persigue los suyos propios.
La empresa Huawei ha rechazado las acusaciones y ha reiterado en repetidas ocasiones que no facilita las llamadas ‘puertas traseras' al Gobierno chino, alegando que hasta ahora nadie ha presentado ni una sola evidencia que apoye tales preocupaciones.
Más: El fundador de Huawei niega que espiase a favor de China