"Me guardo la respuesta, ya que atañe al contenido de las negociaciones", dijo Abe, a quien un diputado opositor inquirió al respecto.
Durante décadas, Tokio ha condicionado la firma del tratado de paz con Rusia, un asunto pendiente desde 1945, a la devolución de las islas Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai (archipiélago de las Kuriles del Sur), que son los "territorios del norte" para los japoneses.
Japón se escuda en el Tratado Bilateral de Comercio y Fronteras que firmó con Rusia el 7 de febrero de 1855.
En noviembre pasado, el presidente ruso, Vladímir Putin, y el primer ministro nipón, Shinzo Abe, acordaron en una cumbre en Singapur impulsar las negociaciones sobre el tratado de paz con base en la declaración soviético-japonesa de 1956, el único documento reconocido por ambas partes.
La declaración menciona la posible transferencia de dos islas Kuriles del Sur tras la firma del tratado de paz, pero no especifica con qué motivo podría realizarse ni quién ejercería la soberanía sobre dichos territorios.