"Lo que nos motivó fue el carácter humano de la historia que se estaba contando, era muy propicio el nivel de utilidad para la creación y el redimensionamiento del símbolo, algo que permite dialogar con el espectador de hoy, trabajando desde lo humano y no desde lo anecdótico", comentó a Sputnik el cineasta.
Para Gil, el simbolismo humano de los acontecimientos "es el punto de partida, en una temática que estoy abordando desde 1992, cuando realicé una serie documental junto al historiador Eusebio Leal, donde él aborda este período de 1871, y nos "dejó en sangre" la necesidad imperiosa de seguir soñando", comentó a esta agencia.
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"Cuando se hizo la investigación de estos trágicos acontecimientos, hace más de 26 años, descubrimos que daba para mucho más que para un documental y llegamos al punto de imaginar una película —desde 1992—, un espacio de tiempo que permitió investigar y profundizar en esas zonas de silencio que tenemos todos respecto a esos acontecimientos ocurridos el 27 de noviembre, hace 147 años", agregó.
Sputnik también conversó con Ángel Alderete, director de fotografía de "Inocencia", quien comentó que cuando comenzó a leerse el guión "me venían las imágenes, y cuando empecé a hacer la película ya no eran imágenes, eran palabras, a medida que avanzaba el discurso que se estaba pronunciando, más allá de la fotografía".
"Se trabajó en un escenario muy contaminado, hubo que revivir una época en 1871, y decidí trabajar desde la perspectiva de un pintor que admiro —Rembrandt— para acercarme a esa realidad, e iluminar lo que más me interesaba y lo demás lo dejaba a oscuras, y eso me permitió diseñar toda la iluminación del filme", dijo Alderete.
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"Inocencia" recibió un Premio Especial durante el recién finalizado 40 Festival internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, y despertó expectativas entre el público cubano, que este 30 de enero se hizo presente en las salas de cine de la capital de la isla.
"Hacer "Inocencia" es un honor para mí, primero porque mucha gente descubrirá detalles en la vida de los estudiantes, el proceso del juicio y los conflictos entre los militares del ejército colonial español y el Cuerpo de Voluntarios de La Habana, quienes definitivamente fueron los que influyeron para que los jóvenes fueran condenados, la injusticia más grande que se cometió en toda la historia de Cuba", dijo Alderete.
Para el director del filme, las deudas del cine cubano con la historia son muchas, porque "el cine trata de parecerse a su época, y cuando miras en retrospectiva tratas de ver desde la actualidad, desde esa posición que nos permite mirar hacia el futuro desde el pasado".