"Lamento que 11 de nuestros conciudadanos franceses hayan perdido la vida durante esta crisis", dijo el mandatario galo en una rueda de prensa conjunta con su homólogo egipcio, Abdelfatah Sisi, en El Cairo.
Macron afirmó que algunas de estas muertes ocurrieron "a causa de la estupidez humana", pero aseguró que ninguno de los fallecidos "fue víctima de las fuerzas del orden".
Francia vive desde mediados de noviembre de 2018 una oleada de protestas de los llamados 'chalecos amarillos'.
Los manifestantes, que visten prendas fluorescentes, protestaban en un principio por el alza en los precios de los combustibles y los impuestos relacionados, pero luego sus reivindicaciones se extendieron a otras demandas sociales y políticas.
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Las manifestaciones han derivado en múltiples enfrentamientos con las fuerzas del orden, destrucción de edificios y automóviles, saqueos y otros hechos violentos.