"Reconozco las profundas preocupaciones en la Cámara de los Comunes [sobre la frontera irlandesa] y es lo que debatiré hoy con mis colegas, pero no espero avances inmediatos", comentó a la prensa May al llegar a la cumbre de los líderes de la UE.
En cuanto a su permanencia como líder del Partido Conservador para las próximas elecciones de 2022, respondió que le gustaría seguir al frente del partido pero, a la vez, dijo que entiende que miembros del partido preferirán "participar en los comicios con un nuevo líder".
La víspera May ganó la moción de confianza de los tories con 200 votos a favor y 117 en contra.
Los conservadores iniciaron la moción interna de confianza después de que la primera ministra aplazara la votación en el Parlamento sobre el Brexit prevista para el 11 de diciembre por preocupación de que no podría ser aprobado.
Antes de la votación de confianza May declaró a los conservadores que sabe que no le dejarán liderar el partido en las elecciones de 2022.
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Diputados británicos consideran que el documento sobre el Brexit acordado con la UE no defiende los intereses del Reino Unido y debe ser revisado.
Previamente, más de centenar de diputados del partido de May habían señalado en público su intención de votar con la oposición parlamentaria en contra del pacto.
La solución acordada a la cuestión irlandesa —la llamada 'backstop' o garantía de futuro— para evitar controles aduaneros y una frontera física en la isla es el principal punto de repulsa del plan gubernamental.