Anteriormente, el representante especial de EEUU para Siria, James Jeffrey, declaró en una entrevista con RIA Novosti y Kommersant que aunque Washington considera al presidente sirio, Bashar Asad, como un criminal de guerra, la Casa Blanca no pretende cambiar el liderazgo de Siria y aboga por la integridad territorial de la república árabe.
"La repetición del escenario libio es imposible por la presencia de tropas rusas [en Siria], por lo tanto, tales declaraciones son un paso táctico diseñado para eliminar las acusaciones de agresor contra EEUU", afirmó el politólogo ruso.
Según el experto ruso, EEUU se da cuenta de que la situación en Siria es diferente de las de Irak y Libia.
"EEUU es consciente de que mientras Rusia esté presente en Siria, tendrá que coordinar sus acciones con ella", concluyó Súzdaltsev.
Estados Unidos y varios países de su órbita llevan a cabo desde 2014 una operación contra el grupo terrorista ISIS (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia) en Irak y Siria, en este último país actúan sin ningún mandato de la ONU ni la autorización de Damasco.
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