Cuando se le preguntó a Trump si autorizó que las tropas dispararan a los migrantes, el presidente respondió periodistas: "No tendrán que disparar. Lo que no quiero es que la gente arroje piedras (…) Si hacen eso van a ser arrestados, habrá problemas. No dije disparar. Pero si ellos hacen eso, serán arrestados por mucho tiempo".
EEUU está desplegando más de 5.000 efectivos militares en la frontera con México para frenar una caravana que atraviesa su vecino del sur pero que está aún a cientos de kilómetros de la línea divisoria, y Trump dijo que podría aumentar el número en hasta 15.000 soldados.
La caravana partió desde Honduras hacia EEUU el 13 de octubre con la esperanza de obtener asilo.
Según estimaciones de la ONU, el grupo incluye a más de 7.000 migrantes pero las autoridades mexicanas han dicho que la caravana que marchaba a través de su territorio incluía alrededor de 3.600 personas y que aproximadamente 1.750 solicitaron asilo en el país.
Además: La OIM se opone al incremento de la presencia militar de EEUU en la frontera con México
El 29 de octubre, el comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) Kevin McAleenan dijo que la agencia observaba una segunda caravana de aproximadamente 3.000 solicitantes de asilo en la frontera de Guatemala y México.