"Si la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa no aprueba en enero las enmiendas a sus estatutos que realmente defiendan los derechos de las delegaciones, Rusia puede renunciar a su membresía en el Consejo de Europa y eso no significará daño alguno a la imagen de nuestro país", indicó el senador.
Dzhabárov subrayó que el funcionario europeo "hizo esta declaración por gusto, son sus problemas, no los nuestros".
"¿Ellos quieren tomar café y recibir salarios a cuenta de nuestras cotizaciones mientras no permiten a Rusia cruzar el umbral [de la PACE]?", cuestionó.
Además, Dzhabárov constató que no ha escuchado nada nuevo de los funcionarios europeos.
"Les propusimos cambiar los estatutos de la PACE para proteger totalmente los derechos de todas las delegaciones nacionales, pero ellos rechazaron nuestras propuestas", lamentó.
En 2015, la PACE introdujo nuevas restricciones, en tal situación la delegación rusa declaró la imposibilidad de seguir participando en sus labores y a partir de 2016 Moscú dejó de dirigir la documentación para la acreditación de su delegación ante la PACE.
Además: Consejo de Europa insiste en que Rusia pague su contribución
En marzo pasado, la PACE reconoció por primera vez que la decisión de las autoridades turcas de reducir su elevada aportación, que había asumido por su propia voluntad, y la decisión de Rusia de suspender pagos correspondientes a 2017 y parte de su cuota de 2018, provocaron dificultades financieras, lo cual obligó a la PACE a congelar 1,5 millones de euros de su presupuesto de 2018 (de unos 17,5 millones de euros).