"Justo cuando vemos que se previene una crisis en [la provincia siria de] Idlib, y eso es una muy buena noticia, estamos viendo actividades militares preocupantes en otros lugares (…) Llamamos a todas las partes a evitar acciones militares que solo exacerbarían la ya compleja situación", señaló.
Según el departamento castrense, en estos momentos cuatro cazas israelíes F-16 estaban atacando instalaciones en Latakia y usaron al Il-20 como escudo, exponiéndolo al fuego del sistema sirio de defensa antiaérea.
El Il-20 fue derribado por un cohete del sistema S-200, y murieron 15 efectivos rusos.
Posteriormente, el propio presidente ruso, Vladímir Putin, atribuyó el derribo del avión Il-20 a una serie de casualidades trágicas.
Por su parte, el Ejército de Israel lamentó ocurrido y subrayó que la responsabilidad del derribo del avión ruso recae solo en Damasco, Teherán y el movimiento chií libanés Hizbulá.