"Las autoridades marítimas de Malta e Italia informaron al Aquarius que no otorgarán a 141 personas a bordo un lugar seguro para desembarcar", tuiteó la ONG.
📌Les autorités maritimes maltaises et italiennes ns ont informés qu'elles n'indiqueraient pas de lieu sûr à l'#Aquarius pr débarquer les 141 rescapés. Le navire a dc atteint une position de stand-by à équidistance de #Malte et de #Italie et attend qu'un lieu sûr lui soit assigné pic.twitter.com/lciuwMw0om
— SOS MEDITERRANEE France (@SOSMedFrance) 13 августа 2018 г.
La nota indica que el Aquarius "alcanzó una posición de espera exactamente entre Malta e Italia y aguarda a recibir nuevas instrucciones".
Más aquí: El caso Aquarius debería ayudar a "replantear la política migratoria de la Unión Europea"
El 12 de agosto las ONG Médicos Sin Fronteras y SOS Mediterránee, que operan el Aquarius, pidieron a varios Gobiernos europeos que le asignen un puerto seguro donde poder desembarcar a los 141 inmigrantes que llevan a bordo.
El viceprimer ministro y titular del Interior de Italia, Matteo Salvini, aseguró el 13 de agosto que los puertos italianos seguirán cerrados para el barco Aquarius, "propiedad alemana alquilada por una ONG francesa con tripulación extranjera, que navega en las aguas maltesas bajo la bandera gibraltareña".
"Puede ir adonde quiera menos a Italia", subrayó.
Por su parte, Laia Ortiz, alcaldesa en funciones de Barcelona, se ofreció a acoger a los inmigrantes.
"Barcelona siempre estará comprometida con la vida, y yo creo que lo que estamos hablando precisamente es de eso, (…) son personas que están huyendo, que necesitan ser rescatadas y creo que esto está ante todo, y por tanto Barcelona una vez más nos ofrecemos para poder acoger" a los migrantes, dijo en una rueda de prensa.
Asuntos relacionados: España: juego político con los inmigrantes
En junio de 2018 Italia y Malta prohibieron al mismo barco desembarcar en sus puertos a más de 600 inmigrantes.
La embarcación estuvo varada varios días en el Mediterráneo hasta que España aceptó acogerla.
Según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), solo en este año más de 60.000 migrantes llegaron a Europa por el mar Mediterráneo.
Otros 1.524 refugiados se dan por muertos o desaparecidos en el mar en el intento de alcanzar las costas europeas.