"El 6 de agosto el Ministerio de Exteriores de Rusia convocó al embajador extraordinario y plenipotenciario de la República Helénica en la Federación Rusa, Andreas Fryganas, y le informó sobre medidas tomadas por Rusia en respuesta a las acciones hostiles de Atenas realizadas en julio contra los diplomáticos y ciudadanos rusos", dijo la Cancillería en un comunicado.
A su vez, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, declaró que esta acción no quedará sin respuesta y dijo que el "pueblo griego debe mantener sus relaciones con Rusia y no sufrir por las provocaciones sucias en las que se vio implicado Atenas".
Por su parte, el Ministerio de Exteriores griego, al comentar las declaraciones de Zajárova, acusó al ente homólogo ruso de faltar al respeto a Grecia y no entender el mundo de hoy, así como exigió dejar de inmiscuirse en los asuntos internos del país heleno.