En una sesión que empezó en la mañana, los miembros de la junta votaron por la permanencia de Chávarry en el cargo con tres votos a favor y dos contra, y con la presencia del involucrado en la votación, informó el diario local La República.
Interceptaciones telefónicas reveladas por la prensa la semana pasada indican que Chávarry sostuvo conversaciones con el cuestionado juez supremo César Hinostroza.
En esas conversaciones, Chávarry busca supuestamente asegurar su nombramiento como fiscal de la Nación con el respaldo de Hinostroza, además de arreglar una reunión con "periodistas amigos" para definir una campaña para asegurar su elección.
Esta reunión con la prensa "amiga" se realizó en la casa del empresario Antonio Camayo, quien está detenido por formar parte presuntamente de la red criminal "Los cuellos blancos del puerto".
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Esta red operaba principalmente en el puerto del Callao (centro, colindante a Lima), y estaba dedicada al tráfico de influencias, sobornos y lavado de activos, entre otros delitos.
La ratificación en el cargo de Chávarry se da a pesar de que reconoció haber mentido sobre sus vínculos con Hinostroza y Camayo.
