"Las autoridades de la República Centroafricana, el Gobierno ruso y la ONU deben actuar con rapidez para llevar a cabo una investigación exhaustiva y transparente de estas muertes", dijo, citada en un comunicado del CPJ.
Quintal subrayó que Rusia, la República Centroafricana y la ONU deben "garantizar que el asesinato de los periodistas –forma de censura más brutal– no tenga lugar con impunidad".
Sus cuerpos fueron hallados cerca de la ciudad de Sibut, situada a unos 300 kilómetros al norte de la capital, Bangui.
El proyecto del empresario y activista ruso Mijaíl Jodorkovski, Centro de Gestión de Investigaciones (TZURrealism), confirmó a Sputnik que envió un grupo de filmación a la República Centroafricana y que perdió la comunicación con él.
De acuerdo con la investigación que lleva a cabo este centro, los periodistas fueron asesinados el 30 de julio con armas automáticas a 180 kilómetros de Bangui, capital de la República Centroafricana.
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La República Centroafricana está sumida en un conflicto armado desde finales de 2013.