"La medida de suspensión preventiva en el cargo, por presunta comisión de faltas muy graves, implica su separación del Poder Judicial hasta el término de las investigaciones y, de comprobarse lo hechos, serán destituidos de sus cargos sin posibilidad que retornen a laborar en el Estado", reza el documento publicado por la OCMA.
Ríos Montalvo se desempeñaba como presidente de la Corte del Callao, el cargo de mayor jerarquía dentro de la jurisdicción.
El magistrado era duramente cuestionado desde que se divulgara una serie de conversaciones telefónicas interceptadas en las que participaría de tráfico de influencias.
Ríos Montalvo le dice a su interlocutor: "Como garantía, si no pasa nada [no lo nombran] lo devolvemos; estoy pensando en 10 'verdecitos' [10.000 dólares]; proponle, pero como garantía, yo le doy mi palabra (…) Si no sale (el nombramiento) se lo devuelvo [el monto de 10.000 dólares]".
Estas separaciones de jueces serían las primeras sanciones concretas derivadas del escándalo producto de unas investigaciones periodísticas que han revelado corrupción en el sistema judicial peruano.