De acuerdo con el experto, el RPG-7 tiene una fama en el mercado armamentístico que es comparable con el fusil de asalto Kalashnikov. Esta popularidad se explica por una multitud de razones.
Cuando la simplicidad es una ventaja
Según explicó el columnista, todas sus ventajas provienen de su simpleza. Debido al hecho de que se trata de un arma muy simple —y confiable—, el RPG-7 es muy barato. No obstante, el lanzagranadas soviético no pierde en efectividad.
"Los sistemas antitanque complejos con altos niveles de penetración son caros de producir, manejar y mantener. Mientras tanto, el RPG-7 es extremadamente barato. (…) Además de destruir tanques, el lanzagranadas puede cumplir muchas otras misiones", señaló a Sputnik Maxím Popenker, experto en armas de fuego.
Al mismo tiempo, el RPG-7 permite hacerlo a una distancia entre 200 y 300 metros con un mínimo coste, pero con la misma efectividad. Además, cabe destacar que dicha arma pesa muy poco, lo que permite que un solo soldado pueda llevarlo junto con una "considerable" cantidad de munición.
El soldado polivalente
Otro punto fuerte del lanzagranadas es su universalidad que es resultado de sus municiones. Ante todo, están disponibles por todo el mundo y una multitud de países las produce. Por ejemplo, las fuerzas expedicionarias de EEUU hacen uso de granadas fabricadas en Bulgaria y China.
Por si ello fuera poco, el columnista destacó que dichas municiones son constantemente modernizadas, lo cual amplia el rango de aplicaciones del RPG-7. Incluso ya hay granadas que son capaces de penetrar el blindaje reactivo de tanques modernos.
El propio lanzagranadas también fue renovado con la instalación de nuevas miras ópticas con telémetros integrados y sistemas de visión nocturna. Por lo cual, la combinación del sistema actualizado junto con una gran variedad de granadas convierten al RPG-7 en un arma polivalente capaz de cumplir una variedad de misiones: destruir tanques, maquinaria blindada, bunkers y tropas enemigas.
Éxito comercial
Con más de nueve millones de unidades fabricadas, el RPG-7 es el lanzagranadas más producido del mundo. Dicha arma es incluso tan popular que sigue fabricándose no solo en países de la antigua República Soviética, sino incluso en EEUU.
"Ya hace tiempo que los estadounidenses apreciaron este arma. Además, se pueden encontrar municiones para él en cualquier parte", dijo Popenker al mencionar que desde mediados de los años 2000 estos lanzagranadas se fabrican en EEUU.
Un arma que no tiene iguales
El RPG-7 aún tiene una larga vida por delante porque no hay alternativas para él. Es un arma muy compacta y multifuncional que se muestra mejor en conflictos locales donde la infantería no tiene el apoyo de la maquinaria, concluyó el columnista.
Es por ello que a pesar de tener toda clase de nuevos lanzagranadas —tales como el RPG-26, RPG-27 o el RPG-30- el ya clásico RPG-7 sigue en servicio activo de las Fuerzas Armadas de Rusia sin que se prevea un reemplazo para él.
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