En la gala de recepción que ofreció en el ministerio de Exteriores israelí, en Jerusalén, Netanyahu afirmó que la decisión de Trump "afirma una simple verdad, que Jerusalén fue, es y será siempre la capital del pueblo judío".
"Este es un momento crucial, el presidente Trump está haciendo historia, estamos profundamente agradecidos y nuestro pueblo estará eternamente agradecido", dijo el jefe del Gobierno israelí en presencia de Ivanka Trump, hija del líder estadounidense, que mañana presidirá el acto de inauguración de la nueva embajada.
Diplomáticos de 33 países asistieron a la recepción, a la que estaban invitados 86 representantes oficiales extranjeros y casi 800 personas más.
Netanyahu pidió a los diplomáticos que hagan "lo correcto" y trasladen también sus embajadas a Jerusalén.
Trump ha roto el consenso de la comunidad internacional, que mayoritariamente no reconoce la ciudad santa como la capital de Israel porque su zona oriental está ocupada por los israelíes y tendría que ser la capital del futuro Estado palestino.
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Otros países, como Guatemala y Honduras, han seguido la iniciativa de Trump y también trasladaran su embajada a Jerusalén.