Sputnik dialogó con la cineasta boliviana desde Washington DC, ciudad en la que se encontraba para hablar con senadores y congresistas estadounidenses con el objetivo de acercarles testimonios de ciudadanos sirios y videos de su autoría para que "entiendan que las sanciones [impuestas por Occidente a Siria] no están dañando al Gobierno [de Bashar Asad] sino a la gente que ya lleva siete años de guerra y medio millón de muertos".
From the headquarters of the #WhiteHelmets who reported D alleged #chemicalatack in #Douma Meet them & take your conclusions Desde la base de los #CascosBlancos q reportaron el supuesto ataque quimico en #Duma Conócelos y saca conclusiones FullVideo👉🏼 https://t.co/n1rH9DKIiz pic.twitter.com/p5aHPTD8GK
— Carla Ortiz (@CarlaOrtizO) 17 de abril de 2018
La cineasta boliviana recorrió gran parte del territorio sirio para filmar el documental ‘Voz de Siria', cuyo objetivo es mostrar el drama del conflicto desde el punto de vista de los principales afectados y sus vivencias contradicen lo que los medios hegemónicos suelen mostrar sobre la guerra.
📻Carla Ortiz, cineasta boliviana que ha visto a #Siria desde dentro — escucha el programa completo en: https://t.co/yT6hMMVIQP pic.twitter.com/XHwrfdWbcO
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 29 de diciembre de 2016
Una de las cosas que más le impactó fue recorrer las calles de Alepo y encontrar que muchas escuelas habían sido tomadas como centros de operaciones de Al Nusra, organización terrorista asociada a Al Qaeda, y a los Cascos Blancos, grupo que se autodefine como una organización de voluntarios para la protección y asistencia de civiles en las zonas controladas por los distintos grupos rebeldes opuestos al Gobierno.
"Vi cómo los Cascos Blancos compartían edificios con grupos extremistas de Al Nusra sin ningún tipo de problemas. Si eres un civil y has visto lo que estos grupos le han hecho a tu gente y a tu familia, violando a tus hijas, decapitando personas, jamás estarías de acuerdo compartir algo con alguno de estos grupos", señaló.
A partir de estas experiencias decidió realizar un seguimiento al tema. Se contactó con civiles que se habían ofrecido como voluntarios para trabajar en esa organización. "Muchos me decían que en un principio creían que iban a salvar vidas pero luego se dieron cuenta que en realidad parte del auxilio se le daba a grupos armados, de esos que les dicen ‘moderados', pero que de eso no tienen nada", sostuvo
La gente en las calles le advirtió que los Cascos Blancos "no salvaban civiles", que les "negaban servicios en los hospitales a los niños", y que durante la batalla de Alepo "trabajaron mano a mano" con el grupo Al Nusra.
📎 📷 🎥 Tres casos en los que se usó a niños para instigar la guerra en Siria https://t.co/9WSkNhHEkE
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 29 de abril de 2018
Denunció también que "cada vez que un periodista o yo hemos entrado en sitios tomados por rebeldes encontramos armas químicas y armas convencionales".
"Las potencias que supuestamente están tomando el papel de policías del mundo deberían tener mayor conocimiento de quiénes son las personas de quienes han filmado los videos de los supuestos ataques químicos", explicó.
Por el contrario, "se encargan de mantener esa desinformación cínicamente para permitir bombardeos que siguen destruyendo un país que está tratando de luchar contra un terrorismo del que todos en Occidente somos responsables, porque las armas que se mandan a grupos moderados siempre terminan en manos de extremistas", agregó.
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"Hasta la gente de la oposición siria pide por el final de una guerra que ha derramado demasiada sangre. Debemos difundir la información alternativa para ayudar a esta nación. Tenemos que dejar de pensar que Siria está lejos. Un niño sirio no es diferente a nuestros hijos", dijo Ortiz.
Testimonio de un niño sirio que participó en el montaje del ataque químico en Duma a cambio de comida https://t.co/WXi2Yzz050
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 19 de abril de 2018
"El terrorismo que afecta a ese país también afecta al nuestro. Es necesario mirarnos al espejo y preguntarnos si queremos ser ese grupo de personas que ha cambiado la historia para poder decirle a nuestro nietos si contribuimos a hacer un mundo mejor o nos quedamos callados y fuimos indiferentes", concluyó.