Según Shaw, en los últimos tiempos las tropas gubernamentales sirias lograron éxitos en la lucha contra los grupos terroristas y radicales, por lo tanto el Gobierno de Damasco no tenía motivos para realizar ataques químicos.
Recordó una declaración de un general estadounidense ante el Congreso en la que el oficial destacó que el presidente sirio, Bashar "Asad ganó esta guerra, hecho que debemos aceptar", así como los tuits del presidente de EEUU, Donald Trump, sobre la pronta victoria sobre el grupo terrorista ISIS (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países) y la retirada posterior de las tropas norteamericanas de Siria.
Grupos de la oposición armada y ONGs relacionadas con ellos acusan a las tropas gubernamentales sirias de haber arrojado el 7 de abril un barril con gas cloro sobre Duma, en Guta Oriental, hecho que Damasco niega rotundamente.
Rusia sostiene que el supuesto empleo de agentes tóxicos en Duma es "un montaje" e insiste en esperar a que los expertos de la OPAQ lleven a cabo una investigación sobre el terreno, mientras que algunos países, entre ellos EEUU, Alemania, Francia y el Reino Unido, ya responsabilizaron al Gobierno de Asad del supuesto ataque.