"Había que hacer un análisis y se estaban viendo los caminos legales para dar una posible solución a este requerimiento", explicó Vinueza, jefe de la Unidad Antisecuestro y Extorsión de Ecuador.
Pero después de varias conversaciones, "el contacto se perdió el 7 de abril", añadió.
El presidente Lenín Moreno confirmó más temprano este 13 de abril la muerte de los tres trabajadores del diario ecuatoriano El Comercio.
Vinueza detalló que las conversaciones avanzaban positivamente y al inicio del diálogo los secuestradores únicamente exigían la liberación de tres de sus hombres que habían sido apresados por la policía ecuatoriana.
Pero luego la demanda se extendió y Guacho reclamó además que Ecuador pusiera fin al acuerdo que tiene con Colombia para luchar contra el narcotráfico y las actividades irregulares en la frontera común.
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Según Vinueza, el último día de comunicación fue el 7 de abril, cuando "se le hizo conocer (a alias Guacho)" un video de uno de sus hombres detenidos en el que este manifestaba que estaban siendo bien tratados y que Ecuador tenía intenciones de visibilizar sus demandas.
El jefe de la Unidad Antisecuestro y Extorsión de Ecuador reveló que el contacto siempre fue por medio de la aplicación WhatsApp a la cual alias Guacho se conectaba alrededor de 10 minutos para intercambiar información.
Según Vinueza, los secuestradores no se mantuvieron en un territorio, sino que transitaban entre Ecuador y Colombia, por lo que no se sabe a ciencia cierta dónde fueron retenidos los reporteros y dónde fueron asesinados.
La ejecución de los tres secuestrados fue confirmada por Moreno, al no haber recibido prueba de vida una vez transcurridas las 12 horas que puso de plazo a los secuestradores.
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El miércoles el medio colombiano RCN informó haber recibido unas fotografías de cadáveres que parecían corresponder a los tres secuestrados que fueron entregadas a asociaciones de libertad de prensa de Colombia y Ecuador.
El documento está fechado "abril de 2018" y firmado "FARC E.P — Dirección del Frente Oliver Sinisterra".
El secuestro se produjo el 26 de marzo, cuando el reportero Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el chofer Efraín Segarra fueron retenidos presuntamente por el grupo Oliver Sinisterra, comandado por alias "Guacho".
Los secuestrados estaban en la zona reportando una ola de atentados que comenzaron en la frontera el pasado 27 de enero.
Guacho es identificado como Walter Patricio Arizala, un ciudadano ecuatoriano disidente de la FARC, guerrilla disuelta tras el acuerdo de paz firmado con el Gobierno de Colombia en noviembre de 2016 y convertida ahora en partido político.
Las autoridades de los dos países atribuyen a Guacho los hechos violentos registrados en la frontera desde el 27 de enero.