El centro de investigaciones de la Fiscalía regional de Roma calificó "la actividad criminal del hombre" de "sumamente sospechosa" y lo acusó de incitar a cometer delitos con fines terroristas y formar parte de un grupo terrorista.
El 29 de marzo, la justicia italiana ordenó el arresto de cinco personas —cuatro nacionales de Túnez y un palestino— supuestos contactos del terrorista tunecino Anis Amri que en 2016 mató a doce personas con un camión en un mercadillo navideño de Berlín.
Se informó que los cinco radicales fueron detenidos antes de que iniciaran sus preparativos para un ataque.
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El 28 de marzo, en Turín fue detenido un italiano de origen marroquí acusado de la propaganda islámica y la participación en el grupo terrorista ISIS, proscrito en Rusia y otros países.
En vísperas de la Pascua las autoridades italianas redoblaron las medidas de seguridad antiterrorista.