La representante del Departamento de Estado de EEUU ofrecerá presuntamente a Ankara sus sistemas de defensa antiaérea Patriot. Washington considera que esta oferta puede servir como alternativa al trato de compra de los Triumf rusos por parte de Turquía, declaró a Sabah un alto funcionario diplomático estadounidense que prefirió permanecer en el anonimato.
El diplomático entrevistado manifestó que la Administración Trump ha convertido la venta de armas en una herramienta de su política exterior, por lo cual es posible que pronto el Congreso de EEUU trabaje en la facilitación del proceso de aprobación de iniciativas encaminadas a la venta de armamento.
En diciembre del año pasado, Rusia y Turquía firmaron en Ankara un acuerdo sobre el suministro de dos baterías del sistema S-400.
El ministro de Exteriores otomano, Mevlut Cavusoglu, había comentado con anterioridad que su país fue objeto de críticas y hasta amenazas por la decisión de adquirir armamento antiaéreo a Rusia.
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A principios de marzo, la vicesecretaria general de la OTAN, Rose Gottemoeller, aseguró que el sistema de misiles antiaéreos S-400 de fabricación rusa es incompatible con los sistemas de defensa antimisiles de la Alianza Atlántica, y debían tenerlo en cuenta quienes decidieran comprar armas de Rusia.
El sistema antiaéreo S-400 Triumf —SA-21 Growler, según la clasificación de la OTAN— es capaz de abatir aparatos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero, proyectiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
El S-400 tiene un alcance de hasta 400 kilómetros y puede destruir blancos a alturas de hasta 30 kilómetros. Por sus prestaciones, este sistema pertenece a la generación 4+ y es el doble de eficaz que sus antecesores.
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