"Dentro de dos años enviaremos la misión Luna 25", dijo Komarov al intervenir en el foro "Rusia, un país de posibilidades".
El jefe de Roscosmos precisó que el nombre de la misión no es casual, y se debe a que el último aparato espacial que Rusia envió al satélite natural de la Tierra se llamaba Luna 24, y fue lanzado en 1976.
El objetivo de la misión es estudiar la composición química del regolito (capa de minerales no consolidados que descansan sobre la roca sólida inalterada) de las regiones polares de la Luna, determinar la presencia y concentración de compuestos volátiles de origen espacial, que representan un gran interés científico, como es el caso de hielo de agua.
Lea más: Conoce las empresas y naciones que planean conquistar la Luna
Los equipos de este aparato también estudiarán los procesos en la exosfera polar de la Luna.