Choi, de 62 años, fue detenida e imputada por corrupción en noviembre de 2016, según Yonhap, había presionado a medio centenar de grandes empresas de Corea del Sur, entre ellas Samsung y Lotte, para que donasen sumas importantes a dos fundaciones sin fines de lucro que ella controlaba.
La confidente de Park gastó parte de este dinero para comprar inmuebles en el extranjero y pagar los estudios de su hija en una de las universidades de mayor prestigio en Corea del Sur.
La Corte del Distrito Central de Seúl también sentenció al presidente del grupo Lotte, Shin Dong-bin, a dos años y medio de cárcel por soborno.
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El empresario fue acusado de donar 7.000 millones de won a las fundaciones de Choi a cambio de favores para el negocio de tiendas libres de impuestos.
