Un avión de ataque ruso Su-25 fue derribado el 3 de febrero con un lanzamisiles portátil en la provincia noroccidental siria de Idlib, el piloto se eyectó pero murió al enfrentarse con los terroristas.
"El mayor Román Filípov, fallecido el 3 de febrero de 2018 en un combate contra los terroristas en la República Árabe Siria, fue nominado por el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, a la condecoración de Héroe de Rusia a título póstumo", reza la nota.
"Tras eyectarse y aterrizar cerca del poblado Tel Debes, controlado por los terroristas, Filípov libró una batalla desigual con las armas reglamentarias hasta los últimos minutos de su vida, oponiendo la resistencia a los terroristas", dice el texto.
Cercado por los terroristas y gravemente herido, "el oficial ruso se detonó con una granada estando a varias decenas de metros de los radicales".
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Subraya también que "el piloto intentó mantener la aeronave en el aire e incluso informó al mando que fue atacado".
"Mayor Filípov cumplió con éxito decenas de misiones de combate para abatir a radicales de grupos terroristas internacionales y escoltar a convoyes humanitarios del Centro Ruso para la Reconciliación a localidades liberadas", concluye.