Los investigadores buscaban evaluar cómo afecta el momento y la duración del sueño en el desarrollo o mantenimiento de los trastornos psicológicos en las personas. Para ello estudiaron a un grupo de voluntarios que padecen de 'ruminación', es decir, que muestran altos niveles de pensamientos negativos repetitivos.
"Descubrimos que en individuos con diagnóstico de un pensamiento negativo repetitivo elevado, la duración del sueño es más corta (…) Esto se relaciona con la dificultades para desacoplar la atención de las imágenes emocionales negativas", señaló a ScienceDaily uno de los coautores del estudio, Meredith Coles.
Conciliar un sueño adecuado para obtener el descanso buscado depende en gran medida de que sepamos desconectarnos de los pensamientos que concentran nuestra atención. Si te cuesta conseguirlo, puedes probar los consejos que la neuróloga María Celia Daraio compartió con Sputnik.