La producción del gas natural licuado (GNL) en el yacimiento Yuzhno-Tambeyskoye inició el 5 de diciembre. Situado en la península de Yamal, este yacimiento cuenta con reservas confirmadas de 926.000 millones de metros cúbicos de gas.
La puesta en marcha de la segunda y la tercera línea está programada para 2018 o 2019 y se espera que se realice antes de lo previsto. Los suministros anticipados de GNL de Yamal permitirán a Rusia adelantar a varias plantas estadounidenses y australianas que operan en el mercado mundial, sostuvo la periodista rusa Liudmila Kólbina en su artículo para la revista rusa Expert.
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En el marco del proyecto también se prevé construir una cuarta línea con nuevas tecnologías propias. El GNL producido por esta línea será un 30% más barato.
Según el periódico alemán Die Welt, la empresa rusa Novatek será la primera en el mundo en construir una terminal para la producción de gas natural licuado ubicada cerca del círculo polar, donde la temperatura supera los 50 grados bajo cero durante el invierno.
Aunque Yamal LNG es una empresa privada, el Estado ruso está interesado en su realización debido a que su objetivo es aumentar la presencia de Rusia en el mercado energético mundial.
"Hasta ahora no tenemos tecnologías propias para la licuefacción de grandes volúmenes de gas natural licuado, por lo que Gazprom y Novatek se dedican a desarrollar estas tecnologías lo más pronto posible", explicó Kólbina.
Actualmente, 19 países exportan GNL, entre ellos Rusia ocupa el octavo lugar haciéndose así con el 4,5% del mercado. No obstante, para el año 2035 Rusia planea ampliar la producción de GNL y ocupar el 12% del mercado. Por su parte, las empresas rusas comparten un enfoque más optimista. La administración de Novatek cree que entre el 2025 y el 2030 el país ocupará desde el 15% hasta el 20% del mercado mundial.
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La industria mundial de GNL se desarrolla a un ritmo veloz. Cada vez más jugadores entran en este mercado. Según Alexéi Belogóriev, uno de los directores del Instituto de Energía y Finanzas, el gas natural licuado de EEUU, que también trata de penetrar en el mercado europeo, no puede competir con el GNL ruso. El mayor problema para el GNL de EEUU consiste en que entra en el mercado europeo en un momento en el que hay mucha oferta y en el que los precios van a la baja, mientras que las empresas estadounidenses necesitan que estos sean más altos.