"La escasa presencia de Siria en la estrategia de seguridad nacional de EEUU es de hecho la admisión de la derrota por parte de EEUU y sus subordinados en este país", indicó.
Según el militar, Siria seguiría siendo "la amenaza número uno" para Washington si quisiera legitimar la continuación de sus acciones expansionistas en el país.
No obstante, los estadounidenses "están acechando" y tienen previsto formar a "una nueva generación de terroristas". Bóndarev subrayó que EEUU incluso "aceptó" la presencia en el poder de Bashar Asad hasta 2021.
El militar ruso también afirmó que Washington "pierde influencia en Oriente Medio y en África", mientras que Rusia y China desempeñan un papel cada vez más importante en estas regiones.