"Agradecemos al enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, y a su equipo por sus esfuerzos en la última ronda de conversaciones sirias en Ginebra", dijo Nauert.
El Departamento de Estado urge asimismo a todas las partes implicadas en el proceso a cooperar de manera efectiva para hallar una solución política a la crisis de Siria, dijo Nauert.
Washington apoya el llamado de De Mistura a los defensores del Gobierno sirio para que presionen a Damasco y garanticen su participación en las conversaciones de Ginebra, según la portavoz.
Su resultado no ha sido positivo, pues Damasco calificó de inaceptable el pedido de que renuncie el presidente Bashar Asad, formulado por la oposición, y esta se negó a modificar sus exigencias.
De Mistura calificó la última ronda como "una gran oportunidad perdida" y reclamó a los bandos en pugna que desistan de buscar solamente la victoria sobre el grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico y proscrito en Rusia), sino también la paz.