"El reino llama a buscar soluciones políticas para todos los conflictos de la región, y, ante todo, para el problema palestino", dijo el monarca, agregando que hay que respetar "el derecho de los palestinos de recuperar sus derechos legítimos, entre ellos el derecho a proclamar un Estado independiente con Jerusalén Este como capital".
La semana pasada el líder del país norteamericano anunció que su país reconocía Jerusalén como capital israelí y planeaba trasladar a la urbe su Embajada.
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Israel proclamó Jerusalén como su capital "eterna e indivisible", incluidos sus barrios del este y el centro histórico, arrebatados hace medio siglo a Jordania y anexados más tarde.
La comunidad internacional no reconoce la anexión y considera el estatus de la ciudad como un problema clave del conflicto, razón por la cual todos los países tienen sus embajadas en Tel Aviv.