De acuerdo con el plan valorado en 278 millones de dólares, cerca de 100.000 refugiados rohinyás serán trasladados temporalmente a la isla de Thengar Char situada a unos 60 kilómetros de la costa bangladesí hasta que sean repatriados a Birmania.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) calificó de "desafío logístico" ese plan presentado por primera vez en 2015 por las autoridades de Bangladés.
En noviembre Bangladés y Birmania suscribieron un acuerdo para posibilitar el retorno de cientos de miles de refugiados rohinyás al territorio birmano.
Según el documento, a Birmania podrán regresar solo los refugiados que abandonaron el país después del 25 de agosto del año en curso o el 9 de octubre de 2016 cuando en el estado birmano de Rakáin se produjo la escalada de la violencia.
Lea más: ONU: el fin de la crisis de los rohinyás en Birmania está lejos
Además, los refugiados deben ser residentes de Birmania y regresar al país por deseo propio.
La crisis se desató a finales de agosto después de que el grupo insurgente Ejército para la Salvación Rohinyá de Arakán (considerado terrorista por el Gobierno birmano) atacara varios puestos policiales y cuarteles militares en ese estado.
En respuesta el Ejército de Birmania inició una operación militar, que los defensores de derechos humanos califican de genocidio.
Más aquí: Todo lo que tienes que saber sobre el conflicto de los rohinyás en Birmania
En su informe del 30 de noviembre, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) estimó en 837.000 el número de refugiados rohinyás en el distrito bangladesí de Cox's Bazar, incluyendo unos 624.000 que escaparon de Birmania desde el 25 de agosto.
La cifra de personas que necesitan asistencia es de 1,2 millones, según la OIM.
Para ayudarles se requieren fondos de al menos 120 millones de dólares, de los cuales solo hay disponible un 43%.