Cientos de agentes de seguridad recorren las calles de la ciudad patagónica tras el desalojo de la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu de Villa Mascardi, a 35 kilómetros de la ciudad, durante el cual fue asesinado por integrantes de la Prefectura el joven Rafael Nahuel de 22 años.
Si bien las autoridades han anunciado que el evento no se suspenderá, la cuestión de la seguridad ha pasado a ser una preocupación central para el Gobierno de Mauricio Macri. Más aún cuando durante el próximo año habrá más de 40 reuniones preparatorias en las que participarán cerca de 20.000 funcionarios de los países miembros del G20.
Sputnik contactó al experto en terrorismo Nicolás Dapena para saber cuáles son los principales riesgos de seguridad de la Cumbre y de todos los eventos preparatorios. Para Dapena, si bien el conflicto mapuche ha adquirido niveles preocupantes con la desaparición y muerte de Santiago Maldonado y el asesinato de Rafael Nahuel, no existe ninguna posibilidad de que esto altere el desarrollo de la Cumbre y de todos los eventos previos.
Para Dapena es necesario hacer una distinción entre la ocupación de tierras en forma pacífica y las que se realizan de forma violenta. "En Argentina la toma pacífica de territorio es un delito menor y de carácter provincial. No es una cuestión federal bajo ningún punto de vista", agregó.
En este sentido, el asesinato de Nahuel resulta "un accionar excesivo". "Al norte del país también hay ocupaciones de tierra por parte de aborígenes que no terminan en muerte. Hay un error de concepción gubernamental que está tratando de unificar fenómenos diferentes", explicó Dapena.
"Las autoridades políticas tienen que tener control sobre sus fuerzas de seguridad y tender a descomprimir los conflictos sociales en vez de alimentarlos y potenciarlos. La autoridad en Argentina tiene un desmanejo muy fuerte que está provocando muertes en situaciones de bajo riesgo que no lo ameritan", sentenció.
El experto se refirió también a las declaraciones de altos funcionarios que han azuzado el conflicto con los mapuches, como las de la vicepresidenta Gabriela Michetti, quien dijo que "el beneficio de la duda siempre lo tiene que tener la fuerza de seguridad"; mientras que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguró: "Le damos el carácter de verdad a la versión de Prefectura, no necesitamos pruebas".
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"Alimentar el conflicto con declaraciones explosivas por parte de las autoridades políticas hace que escale el malestar. Tomar esta actitud en vísperas de la cumbre es algo totalmente desaconsejable", señaló.
El G20, integrado por la Unión Europea y 19 naciones más, se reunirá por primera vez en América del Sur para abordar temas que van desde economía, finanzas, empleo, educación, energía y agricultura, entre otros.