Buques, aviones y submarinos extranjeros provenientes de 12 países se hicieron presentes en la probable zona de localización de la nave extraviada, algunos con sospechosa rapidez.
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Según escribía para este mismo medio Raúl Zibechi, "el giro conservador que resulta evidente en países como Brasil y Argentina dibuja una coyuntura propicia para el avance de los planes de Washington (concernientes a) poner freno a la presencia de China en materia económica y de Rusia en el terreno militar.
Putin no podía quedar atrás en la competencia por la influencia sobre las estratégicas aguas australes. El pasado miércoles 22, el mandatario ruso se sumó al coro de cooperantes internacionales ofreciendo ayuda para encontrar el submarino en cuestión. La respuesta fue afirmativa y el Antónov, el avión más grande del mundo, junto a un submarino llegan este fin de semana a la Argentina.
Pero el circuito solidario no termina aquí. Al parecer, las compañías petroleras también están interesadas en encontrar a "los 44". Quizás se vean motivados por el área en la cual se produjo la desaparición del sumergible, cuya superficie coincide con una estratégica zona de potenciales riquezas hidrocarburíferas. ¿Existe otra razón seria que explique la presencia de Noruega en el rastrillaje de aguas argentinas?
En febrero de este año, el Ministerio de Energía y Minería le otorgó a YPF un permiso para contratar a la firma noruega Spectrum ASA con el objetivo de que la misma tomara como tarea la prospección de una superficie de 35.000 km² frente a las costas de las provincias de Buenos Aires, Río Negro, Chubut y el norte de Santa Cruz. Esta empresa especializada en ensayos sísmicos fue contratada a fin de obtener información precisa sobre potenciales sitios de perforación o 'fracking' en alta mar, yacimientos que en un futuro serían explotados por la alianza YPF-Statoil (esta última firma es también de capital noruego). Las pruebas sísmicas son de alto riesgo ya que requieren de un extenso radio de zona despejado de tráfico marítimo: dichos buques se encargan de despedir cañones de sonido que liberan aire comprimido bajo el aura de forma explosiva; por otro lado, al hacer cualquier maniobra de giro, estos utilizan un margen muy amplio y un error provocaría graves consecuencias para sí y/o una embarcación que no se halle a suficiente distancia.
La petrolera francesa Total también puso a disposición su OSS (Offshore Supply Ship) Skandi Patagonia con el fin de "optimizar la búsqueda" del ARA San Juan. Esta empresa, presente en el país desde hace unos 40 años, pisa fuerte en las actividades gasíferas y petrolíferas de nuestro país, siendo la región patagónica su principal fuente de extracción. El ministro Aranguren premió a la firma recientemente ubicando a su exdirectivo en la dirección de la unidad extraterritorial de la cartera que dirige.
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La brasileña Petrobrás y la chilena Enap Sipetrol, a través de sus filiales argentinas, también participan en la multitudinaria expedición de rescate.
La lucha internacional por los recursos naturales y las rutas comerciales nos toca de cerca y, aunque la relativa pax latinoamericana (o el infinito caos en el resto del mundo) permita postergar el foco de atención, los movimientos son cada vez más definidos y visibles.
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