Funcionarios del avión más grande de Rusia empezaron pasado el mediodía a bajar "pertrechos y equipamientos", que luego serán enviados a la zona del operativo de rastrillaje marítimo, dijeron fuentes oficiales a la agencia de noticias argentina Télam.
Las autoridades argentinas deberán poner a disposición ahora al menos siete camiones cisterna para transportar los 150.000 litros de combustible que necesita la aeronave rusa para reabastecerse, añade la agencia.
A principios de diciembre se espera a su vez la llegada del buque oceanográfico ruso Yantar, que se trasladará directamente a la zona de búsqueda llevando equipos de alta tecnología de inspección submarina.
La Armada argentina confirmó que recibió información de que se produjo ese mismo día y en ese mismo lugar un "evento consistente con una explosión".
La nave, construida en Alemania en 1985, se encuentra en su segundo año operativo, después de verse sometida a una extensa reparación entre 2008 y 2014.