"Si no reconocemos ciertos principios constitucionales, nuestra tendencia es siempre caminar hacia el autoritarismo, hacia una cierta centralización; incluso nosotros, el pueblo brasileño, tenemos una cierta tendencia hacia la centralización", afirmó el presidente, según reseñan medios brasileños como Folha de São Paulo y la cadena O Globo.
En 1930 se produjo un golpe de Estado liderado por los estados de Minas Gerais (este) y Río Grande del Sur (sur) que culminó con el derrocamiento del presidente paulista Washington Luís.
Lea más: Gobierno de Brasil recorta más de 2.300 millones de dólares de programa de obras públicas
En 1964, tras un nuevo golpe, comenzó una dictadura militar que se extendió hasta la elección de Tancredo Neves en 1985, quien falleció antes de asumir, dejando la presidencia en manos de su vice, José Sarney.
El acto por la fiesta patria se celebró en la ciudad de Itu en el estado de São Paulo (sureste).
"El hecho de que hemos prácticamente transferido el Gobierno aquí a Itu [este 15 de noviembre] es de una simbología muy fuerte, muy significativa (…) Lo ideal sería que nunca tuviéramos esa centralización o autoritarismo que en cierto momento hubo en el pasado", agregó el presidente.
En la celebración de los 128 años de la proclamación de la República, Temer, ratificó el compromiso de su Gobierno de mantener los principios republicanos para promover la ciudadanía y la democracia, informa un comunicado publicado en la web de la Presidencia.