La iniciativa solo fue respaldada por este grupo, minoritario en la Cámara de Flandes.
Tres diputados de este grupo de extrema derecha pedían "instar al Gobierno federal a reconocer a Cataluña como un Estado independiente soberano".
Además, pedían al Ejecutivo que condenase "inequívocamente la represión española contra el esfuerzo independentista catalán".
Sin embargo, ninguna de las dos propuestas salió finalmente adelante.