Los organizadores del evento, al que asisten varios centenares de personas, pretenden presentar nuevas exigencias al presidente ucraniano, Petró Poroshenko, y ya informaron por altavoces que la Policía impide el paso de la gente a la reunión.
Los manifestantes exigen derogar la inmunidad de los diputadas, cambiar la legislación electoral y crear un tribunal anticorrupción.
Los nuevos puntos incluyen el congelamiento de las tarifas, anunciar elecciones anticipadas, legalizar las armas de fuego, nacionalizar los activos de los oligarcas y suspender las relaciones diplomáticas con Rusia, así como limitar el derecho al voto de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el UPA actuó básicamente en el oeste de Ucrania, donde combatió contra las tropas soviéticas y colaboró con los nazis.
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