Esta fábrica está especializada en la creación de torpedos que pueden ser portados en los submarinos nucleares Borei y Yasen. Últimamente, Dagdiesel ha apostado por la fabricación en serie de torpedos autoguiados submarinos (UGST, por sus siglas en ruso) Futliar, de 533 milímetros.
Новейшая глубоководная самонаводящаяся торпеда «Футляр» пройдет испытания и поступит на вооружение в 2018-омhttps://t.co/N3eOifxneL pic.twitter.com/2R4DHyC6zt
— Защищать Россию (@russiatodefend) 13 марта 2017 г.
Estos proyectiles también se instalarán en los sumergibles de cuarta generación Borei y Yasen para después instalarse en submarinos rusos de generaciones anteriores. No obstante, es poco probable que la fábrica realmente cree un torpedo desde cero y parece que, probablemente, el arma será una versión modernizada del misil Futliar, según el corresponsal militar del diario Svobodnaya Pressa, Vladímir Tuchkóv.
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— Life | Наука (@lf_science) 10 марта 2017 г.
Está previsto que el arma sustituya a unos torpedos anteriores llamados Fisik. Los proyectiles de este tipo entraron en servicio de la Flota en 2015 y han sustituido a los anticuados USET-80, diseñados en el año 1980. Con una velocidad máxima de hasta 83 kilómetros por hora, estos torpedos eléctricos de 533 milímetros y 300 kilogramos de carga tenían un alcance de tan solo 18 kilómetros. Al mismo tiempo, contaban con una profundidad máxima de operatividad de hasta 1.000 metros. Solo un submarino en la historia de la Flota soviética —el K-278 Komsomolets— era capaz de sumergirse a esta profundidad. Fue desarrollado debido a una maniobra de desinformación estadounidense según la cual estaban creando un sumergible con una profundidad máxima de un kilómetro.
En cuanto a los torpedos térmicos USET-80 —también fabricados por Dagdiesel—, que usan el peróxido de hidrógeno en calidad de oxidante, son mucho más poderosos y tienen una mayor autonomía en comparación con los torpedos eléctricos.
En la década de los 90, Dagdiesel probó un 'torpedo grueso' de 650 milímetros y 765 toneladas de TNT. El torpedo se llamó Kit 65-76A, también conocido como el 'asesino de portaviones'. Este torpedo tenía un alcance de 50 kilómetros desplazándose a 92 kilómetros por hora y de 64 cuando alcanzaba los 100.
En cuanto al Futliar, pese a que hasta la fecha se desconocen los detalles técnicos del torpedo, se sabe que utilizará el sistema de propulsión TPS-53, capaz de aumentar el alcance del proyectil hasta los 60 kilómetros y de llegar a una velocidad de hasta 120 kilómetros por hora.
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Además, el motor de turbina del torpedo utilizará combustible Otto-fuel, lo que le permite aumentar su capacidad hasta los 800 kilovatios. De este modo, el Futliar supera al torpedo más popular y poderoso de la Armada de EEUU, el Mark 48, que tiene una velocidad máxima de tan solo 111 kilómetros por hora y un alcance de 50 kilómetros, concluye Tuchkóv.