"El Parlamento debatirá, el Parlament se reunirá. Será un debate y eso es importante", dijo Romeva en declaraciones a la BBC.
De acuerdo con la ley que da cobertura a ese referéndum —también suspendida por el Tribunal Constitucional— la cámara autonómica debe declarar la república independiente de Cataluña si la opción independentista resulta la más votada.
Según los datos provisionales ofrecidos por el Gobierno catalán, en el referéndum del 1 de octubre participaron 2,2 millones de personas de las 5,3 con derecho a voto, de las que un 90% se decantó por la opción independentista.
El consejero de empresa del Gobierno catalán, Santi Vila, llamó en una entrevista con el diario Ara a "evitar decisiones que sean irreparables" y a tener en cuenta que la mitad de catalanes no dan reconocimiento al proceso independentista.
Ante este escenario, Santi Vila reiteró la llamada del Gobierno catalán al diálogo con Madrid.
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Sin embargo, el Gobierno de Mariano Rajoy rechazó tantas invitaciones de diálogo como recibieron porque, a su modo de ver, la unidad de España no puede ser objeto de negociación y menos con unos dirigentes catalanes que eluden los mandatos del Tribunal Constitucional.