El decrecimiento de la actividad empresarial con el objetivo de reducir el nivel de las emisiones y endurecer las normas ecológicas mantendrá el nivel de ganancias de las grandes compañías industriales a medida que aumenten los precios de producción, declaró Wei Yao, especialista en la economía china de Société Générale.
La economista señaló que esta iniciativa de las autoridades chinas puede impactar negativamente en las exportaciones del país.
"El Gobierno chino ha tomado muy en serio la lucha contra la contaminación", escribió Yao en una nota.
La ralentización del crecimiento será un sacrificio necesario para garantizar la estabilidad social a mediano plazo, de acuerdo con la especialista.
Si se quiere duplicar el PIB y los ingresos per cápita del año 2010 para el año 2020, el crecimiento económico no debe ser inferior al 6,5% a lo largo de los próximos años, declaró el presidente de China, Xi Jinping, en 2015.
Por el contrario, si la economía china consigue crecer un 6,8% este año, el ritmo de expansión necesario para conseguir la meta del mandatario será de solo un 6,3% a lo largo de los próximos años.
Durante muchos años, China ha luchado contra la contaminación del aire para revertir el daño causado por décadas de alza económica sin control.